El tabaco, ni verlo

"Los fumadores tienen un mayor riesgo de desarrollar problemas oculares."

Uno de cada tres españoles mayores de quince años fuma, según un Eurobarómetro del año pasado. Como todos sabemos, el tabaco es el enemigo número uno de nuestra salud afectando a los sistemas cardiovascular y respiratorio, . Sin embargo, no solemos ser tan conscientes del vínculo entre el tabaquismo y la salud de nuestros ojos.
En realidad, el tabaco aumenta considerablemente el riesgo de padecer degeneración macular asociada a la edad (DMAE), la principal causa de ceguera en los países desarrollados. Y puede originar o agravar otras condiciones oculares, que muchas veces también llevan aparejada una pérdida visual.

Déjalo ahora

Para prevenir estas enfermedades se pueden tomar varias medidas, pero mantenernos lejos del tabaco debe ocupar un puesto destacado en nuestra lista de prioridades. De hecho, si lo conseguimos, algunos de los riesgos descienden a niveles similares a los de los no fumadores. Incluso se puede detener el daño ocular, dependiendo del tipo de patología y su gravedad.

Enfermedades oculares asociadas al tabaquismo:
  • DEGENERACIÓN MACULAR ASOCIADA A A LA EDAD

El tabaquismo multiplica por 2 el riesgo de padecer degeneración macular asociada a la edad (DMAE). La consecuencia es el daño en las células de la mácula, la zona de la retina responsable de los detalles en el centro de nuestro campo de visión. Además, los fumadores tienen más probabilidades de sufrir todos los tipos de DMAE y de experimentar recaídas tras el tratamiento.
En sus fases iniciales, la visión central puede presentarse borrosa o distorsionada.
Dado que la mácula se encarga de los pequeños detalles, actividades cotidianas, como leer, conducir, escribir, ver la tele o reconocer caras, se vuelven muy  difíciles.

 
  • RETINOPARTÍA DIABÉTICA

El tabaquismo no solo llega a duplicar el riesgo de padecer diabetes. También existe una relación causal entre el tabaco y el desarrollo de la retinopatía diabética, además de otras complicaciones. La retinopatía diabética daña los vasos sanguíneos de la retina y puede ocasionar una pérdida visual considerable.

  • CATARATAS

Las cataratas, están relacionadas con el envejecimiento,  y son la consecuencia de una opacidad del cristalino. La luz no atraviesa correctamente para llegar a la parte posterior del ojo. Si no se tratan, pueden llevar a una pérdida de visión. Aunque las causas concretas se desconocen, su aparición se ha relacionado con factores como el tabaco, la luz del sol y una dieta deficiente. En concreto, los fumadores tienen 3 veces más probabilidades de desarrollar la forma más común de cataratas. Este riesgo se incrementa con la cantidad de cigarrillos que se fuma.

 
  • OJO SECO E IRRITACIÓN

El humo del tabaco contiene irritantes que alteran la película lagrimal, incluso en fumadores pasivos. Agravan los síntomas de ojo seco o las condiciones oculares alérgicas También pueden causar enrojecimiento crónico, en particular si se utilizan lentes de contacto. La prueba es que los fumadores tienen el doble de probabilidades de sufrir ojo seco.

 
  • CONDICIONES VASCULARES

El tabaco favorece el desarrollo de la aterosclerosis, o endurecimiento de las arterias, lo que suele agravar las condiciones vasculares de los ojos. La oclusión de los vasos sanguíneos y el daño al nervio óptico pueden causar una pérdida visual significativa.

  • DURANTE EL EMBARAZO, PROHIBIDO!

Fumar durante el embarazo incrementa el riesgo de aparición de ciertos problemas oculares, como el estrabismo o un desarrollo deficiente del nervio óptico. Además, aumenta la probabilidad de dar a luz prematuramente. Este hecho se vincula con la retinopatía del prematuro, una enfermedad que puede provocar ceguera.

 
  • UVEÍTIS

La uveítis o inflamación de la úvea es un enfermedad ocular grave que daña estructuras clave del ojo, incluidos el iris y la retina. Puede llevar a complicaciones como cataratas, glaucoma y desprendimiento de retina. Las evidencias muestran que los fumadores tienen más probabilidades de sufrir uveítis, ya que el tabaco parece influir en su desarrollo.

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